PuTa

Otro turno mas esta noche. Otra vez las palabras sucias, las manos frías vacías de sentimiento.

Otra vez ese olor a cerveza, a whisky ahogado en hielo, a colonia barata, a cigarro consumido.

Me toca escuchar llantos y hacer mamadas. Por lo menos hoy no hace frío. Tengo que espabilar, mañana me pasan el alquiler. Se acerca un coche, me subo. Poco mas que palabras, me toca, se corre, me paga y me bajo. Me muero de sueño, odio la noche, bueno, al menos estreno los zapatos de cristal negro. Viene una pareja, encima hoy toca trabajo extra, no se conforman ya de uno en uno. Lo mismo, me tocan, se corren, ellos se quieren, me pagan y me bajo. No han pasado ni cinco minutos y ya tengo otro cliente, es de éstos que les da por hablar y contarme qué tal su matrimonio, en el fondo no me importa una mierda, pero por dinero tendré que escucharle. Bueno, no me pagan del todo mal por hablar, lo malo es que me promete volver mañana.

Que raro, llevo ya una hora sin nada, se me empiezan a cansar los pies, cada día estoy peor, ya no soy la dulce niñita a la que llevaban a un hotel para tratarla cual princesa.

Bueno, con esto pondré la cuenta en positivo, es mas, creo que mañana me tomaré el día libre, estoy descuidando demasiado al niño.